Legiones de admiradores de un artista disfrutan a plenitud de su arte y repertorio cuando este lo brinda de forma espontánea y elocuente sobre una tarima, sin jamás llegar a imaginar que muchas veces, esa figura artística, que ríe y que se muestra plenamente alegre ante el público, por dentro está llorando.Héctor Acosta resumió en su sentir esta situación, cuando afirmó que “la vida del artista baila entre lágrimas y sonrisas”, agregando que se ha visto en situaciones en las que llega a su casa de una fiesta y se vuelve llantos.Haciendo galas de su sinceridad, en toda la extensión de la palabra, El Torito les dijo a los productores de “El Despertador” del canal 7, que algunas veces, “bailo, canto y hago y mi fiesta, aunque después que uno llegue a su casa, las lagrimas lleguen a las rodillas, de la impotencia y del dolor que tuviste que vivir en un escenario durante dos horas o más”.En otra vertiente de sus declaraciones, Acosta ratificó sus aspiraciones a la senaduría por Monseñor Nouel (Bonao), afirmando que “todos caben aquí, todo el que quiera apoyarme; peledeistas, reformistas, izquierdistas, bienvenidos sean. No quiero ser un ente de conflicto entre nadie”, y para que nadie tenga dudas en la fe que ha puesto en su aspiración, señaló:” tengo la gran virtud de ser amigo de todos”.Héctor Acosta aprovechó la ocasión para expresar la gratitud y gran alegría que siente, al ser nominado a los Premios Grammy 2013, que se realizarán el 21 de noviembre del presente año en el Mandalay Bay Events Center, de Las Vegas.
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