NUEVA YORK.- Aunque los investigadores podrían tardar hasta 10 días en determinar las causas del descarrilamiento de un tren de pasajeros en El Bronx, que el domingo causó la muerte de cuatro personas y heridas en más de 60, ya se baraja la hipótesis de que el accidente pudo deberse a un exceso de velocidad.Sin embargo, el maquinista del tren, William Rockefeller, dijo a los investigadores que los frenos le fallaron, según reveló a los medios una fuente policial.
Rockefeller dijo que apretó los frenos cuando el tren se aproximaba a la estación Spuyten Duyvil, "pero no respondieron". La Metro-North indicó que se trató del tren 8808, con siete vagones, que salió a las 5:54 a.m. de Poughkeepsie, en el norte del estado de Nueva York, con destino a la estación Grand Central, en Manhattan, donde estaba previsto que llegara a las 7:43 a.m. El descarrilamiento ocurrió a las 7:20 a.m. A unos cien metros de la estación Spuyten Duyvil, en el barrio de Marble Hill, el tren con más de 100 pasajeros tomó una curva, se salió de los rieles y varios vagones se volcaron. Uno de los vagones se deslizó hacia la orilla del río Hudson, y hasta la tarde del domingo se veían embarcaciones de la Guardia Costera rastreando el área por si algún pasajero hubiera caído al agua.
Cientos de policías, bomberos, y personal de la Cruz Roja respondieron a la emergencia. En la busca de posibles sobrevivientes se veían además perros rastreadores de cadáveres y un helicóptero sobrevolando la zona. El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, acudió a la zona del accidente para conocer de primera mano la situación, y estableció un centro de atención a las familias de las víctimas, en la escuela secundaria John F. Kennedy. "Lo que sabemos es que cuatro personas perdieron la vida en las festividades después del Día de Acción de Gracias. El operador del tren está entre los heridos", dijo Cuomo, quien pidió orar por las víctimas. El gobernador dijo que los resultados preliminares sugieren que la velocidad pudiera haber sido la causa del descarrilamiento. "No había problemas evidentes en los rieles que la gente pudiera detectar esta mañana (del domingo)", dijo el gobernador, indicando que pudiera tratarse de un error del operador o una falla del equipo, "pero todo es una especulación hasta que no consigamos los datos de la NTSB la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte". Sin embargo, Earl Weener, responsable del equipo de NTSB, evitó claramente pronunciarse sobre la posibilidad de que el convoy circulara con exceso de velocidad en el momento en que se produjo el accidente. "No sabemos cuál era la velocidad del tren. Lo veremos en los registros", señaló Weener. "La seguridad es claramente un problema en este tramo del carril", manifestó ayer el senador estatal Jeff Klein, que representa el área. En las primeras horas tras el accidente, la vocera de la MTA, Marjorie Anders, dijo que la pronunciada curva donde ocurrió el descarrilamiento es una zona donde se debe circular a baja velocidad antes de llegar a la estación de Spuyten Duyvil. Se indicó que los trenes normalmente reducen la velocidad de 70 mph a 30 mph antes de entrar en dicha curva.